8 de agosto de 2014
Guardaba todo en su corazón 16.07.14
Lectura:
San Mateo: 11, 25-27
Escondiste estas cosas a los sabios y las revelaste a la gente sencilla.
En aquel tiempo, Jesús exclamó: "¡Yo te alabo, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque has escondido estas cosas a los sabios y entendidos, y las has revelado a la gente sencilla! Gracias, Padre, porque así te ha parecido bien.
El Padre ha puesto todas las cosas en mis manos. Nadie conoce al Hijo sino el Padre, y nadie conoce al Padre sino el Hijo y aquel a quien el Hijo se lo quiera revelar".
Reflexión:
"La palabra hermano en el hebreo del Antiguo Testamento designaba también a los parientes próximos: Tíos, sobrinos y primos. En el nuevo testamento, esta palabra puede designar a parientes y a personas de la misma raza o comunidad. Todos los israelitas eran hermanos, así como lo son todos los cristianos. Alrededor de Jesús surge una familia nueva, unida por lazos de fe. El discípulo auténtico es el que obedece o hace, no el que habla o nace". ( Tomado de la explicación de la Biblia de nuestro pueblo).
María fue la primera discípula, dice la palabra de Dios: Ella guardaba todas estas cosas en el corazón. Como cuando guardamos algo muy querido, como una letra de la canción d la Hna. Glenda: "Guardaba todo en su corazón, lo bueno, lo hermoso, lo santo, lo perfecto, aquello que agrada a Dios". María es pues casa de Dios. El vientre bendito donde Dios se acuno y dónde nos acurrucamos todos los bautizados y nacidos en esta Santa Iglesia. Pero no basta nacer en ella sino vivir como discípulos auténticos marcando y haciendo la diferencia en el mundo, cumpliendo nuestra triple misión, ser: sacerdote, profeta y rey.
1. Sacerdote: participar del sacerdocio común es anunciar al mundo la Buena Nueva del Evangelio, llevar a Dios en nuestro vientre y parirlo en aquellos lugares donde el sacerdote no llega, siempre digo en mi trabajo, postgrado y en los sitios de deporte, esparcimiento, quién tiene que hablar de Dios soy yo, que soy la que los frecuento, el sacerdote está limitado
y yo debo ayudar en esa misión de evangelizar en mi metro cuadrado como decimos los cursillistas.
2. Profeta: A los profetas muy poca gente los quería, en los tiempos antiguos los mataban. Tenían la responsabilidad de anunciar y denunciar lo bueno y lo malo, obviamente que por señalar lo que se estaba haciendo mal eran poco queridos, hay muchas personas y me incluyo nos molesta que nos señalen los errores, no matan con el cuerpo pero sí con la vista a quién ose decir estás equivocado. A los profetas le tocó ser ese dedo índice y hoy en nuestro tiempo es a nosotros quién nos toca alzar la voz para señalar tantos vicios, corrupción, maltratos, injusticia, falta de solidaridad, falta de hermandad y la lista es larga...No te calles ante lo que sabes que puede ser mejor.
3. Reyes: no para ser servidos sino para servir a los demás, Jesús nos mostró la humildad de su reino al servir a los más pobres y desposeídos, a los rechazados. ¿Soy de los que piensa que todo lo merezco? ¿Me ocupo solo de complacer mis caprichos o busco agradar o ayudar a otros con gestos sencillos?
María hoy en la advocación de la Virgen del Carmen nos ayude a reflexionar sobre nuestro discipulado, ella que modela con su ejemplo nos haga dóciles a esta misión.
Feliz día Dios y la Virgen del Carmen te bendigan.
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