16 de mayo de 2014
Es su mano quièn me sostiene 15.05.14
Lectura:
Del salmo 88
Proclamaré sin cesar la misericordia del Señor. Aleluya.
Proclamaré sin cesar la misericordia del Señor y daré a conocer que su fidelidad es eterna, pues el Señor ha dicho: "Mi amor es para siempre y mi lealtad, más firme que los cielos.
He encontrado a David, mi servidor, y con mi aceite santo lo he ungido. Lo sostendrá mi mano y le dará mi brazo fortaleza.
Contará con mi amor y mi lealtad y su poder aumentará en mi nombre. Él me podrá decir: 'Tú eres mi padre, el Dios que me protege y que me salva' ".
Reflexión:
"Lo sostendrá mi mano y mi brazo le dará fortaleza."
Particularmente de este salmo, me quedo con este versículo.
Muchas veces he escuchado de las personas expresiones como: Dios metió su mano, Dios lo protegió con su brazo, la mano de Dios lo sostuvo...estas tienen lugar luego de que ha pasado alguna situación de peligro donde se ha salido ileso, y ciertamente ha sido la mano y el brazo de Dios quièn nos sujeta, piensa en esos momentos de peligro que has vivido... ¿listo?, ahora explicate a ti mismo como rayos saliste ileso o ilesa de eso, seguramente algo sucedio, alguièn llego, y nada te paso. Ese algo, ese alguien,fue la intervención de Dios para protegerte.
Cuando miramos atrás vemos la vida y Èl ha estado en todo. Y ¿cómo no va a estar? Si con Él, inicio todo, y nuestra vida nació en sus manos, entonces, aquel que nos creó, ¿cómo no ha de meter su mano para que su obra no sea destruida?.
Tù y yo somos su obra perfecta, así que no dejará que te hundas.
La mano de Dios esta extendida en este instante, sujétala fuerte y que nada te dañe.
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